"Málaga es como su Mar, siempre la misma y siempre diferente, una Ciudad para el Encuentro, el Trabajo y la Convivencia"

viernes, 8 de marzo de 2013

LA INDUSTRIA MALAGUEÑA TRAS LA CONQUISTA POR LOS REYES CATOLICOS

En 1348, mientras la peste negra asolaba toda Europa, la Alcazaba y Castillo de Gibralfaro toman su forma definitiva. La ciudad dispone de varias puertas que permiten el paso a través del recinto amurallado, cuyos nombre siguen perdurando hoy: Puerta Oscura, Puerta del Mar. 


La Conquista e Incorporación a la Corona de Castilla y La conquista del reino de Granada comienza con la toma de Alhama por los cristianos en febrero de 1482. A los pocos meses, Muley se refugia en Málaga al ser destronado por su hijo Boabdil con el apoyo de los abencerrajes que habían regresado del exilio.

Durante la Reconquista los árabes construyeron gran cantidad de torres de defensa para la ciudad; así, al oeste en Torremolinos, al norte en el Puerto de la Torre (antiguo camino a Antequera), al noroeste las 11 torres de Alhaurín de la Torre (de las que no quedan restos) y la torre de Alhaurín el Grande y al este la de Torre de Benagalbón. 

La conquista de la ciudad de Málaga por los Reyes Católicos en agosto de 1487 supuso un episodio sangriento en la guerra final por la conquista del Reino de Granada. Después de un largo asedio cortando las entradas de agua y víveres a la ciudad, desde el 5 de mayo al 18 de agosto, el poderoso ejército castellano formado por 12.000 jinetes, 25.000 infantes y 8.000 soldados más de apoyo, logró tomar la ciudad defendida por 15.000 gomeres africanos y guerreros malagueños.

El asedio de la ciudad fue uno de los más largos de la Reconquista, duró 6 meses y cortó el suministro de alimentos, rindiéndose estos el 13 de agosto de 1487, la población fue castigada a la esclavitud o a pena de muerte, con excepción de veinticinco familias que pudieron permanecer en Málaga, como mudéjares, en el recinto de la morería. Málaga es conquistada y sólo se permite la permanencia en la ciudad a unas pocas familias en calidad de mudéjares, es decir, musulmán bajo dominio cristiano que reconoce la soberanía de los Reyes Católicos, entrega sus fortalezas y se compromete a pagar los impuestos, recibiendo, en contrapartida, protección real y garantías de que serán respetadas sus creencias, leyes y usos sociales. Con la conquista de la ciudad se inicia el reparto de las tierras entre los conquistadores. Las órdenes religiosas ocupan la mayor parte del espacio extramuros de la ciudad. El interior se divide en cuatro parroquias, se derriban las sencillas casas árabes para construir los nuevos palacios y se abre la calle Nueva para comunicar la puerta del Mar de la muralla con la actual plaza de la Constitución. Sin embargo los terremotos, epidemias, inundaciones provocadas por el río Guadalmedina, malas cosechas y una pésima administración unida a la corrupción general de la época hacen entrar a la ciudad en una etapa de decadencia.

La caída de Málaga en la siguiente fase de la guerra; los reyes Católicos expugnan diversas plazas, entre ellas Ronda el 22 de mayo de 1485, de la que era alcaide Hammet el Zegrí, cuyo nombre lleva una calle de Málaga próxima al circo romano, que se refugia en Málaga, donde encabeza la resistencia, pese a las ofertas de los Reyes Católicos para conseguir su vasallaje.

Había de culminarse la conquista de Málaga y su tierra por los Reyes Católicos, en Agosto del año 1487, para que se recogiera toda una serie de datos sobre la ciudad que encontraron don Fernando y doña Isabel. Cronistas tales como Hernando del Pulgar, Alonso de Palencia o Bernáldez, que acompañaban a los Reyes, nos dejaron unas narraciones de los hechos tan detalladas que trascienden incluso el terreno topográfico. Por otra parte, los conquistadores se ocuparon en seguida en organizar el reparto de los bienes raíces de los vencidos entre los nuevos pobladores cristianos.

Así, a los veinte días de aquel hecho histórico, el 7 de Septiembre, los Reyes nombraron los repartidores, encargándoles que hicieran un inventario de todas las casas y tierras, lo mismo incultas que de labor, para su posterior reparto entre los que se avecindaban en ellas, dándoles como título de propiedad la correspondiente carta de donación. Se repartieron casas y heredades, se autorizó la construcción de mesones y ventas, se fomentó la repoblación de los arrabales, entre otras actuaciones, recogiéndose todo ello en cinco volúmenes que se conservan en los archivos Municipal y catedralicio de Málaga.

Entre las instrucciones que dieron los reyes para este repartimiento, estaba la de construir iglesias, monasterios y hospitales, una casa para Ayuntamiento, y todo lo que fuera necesario para la vida del nuevo municipio cristiano como jabonerías, tenerías, alhóndigas, aduana, tiendas de mercaderías, boticas y baños que quedaban para la Corona, queriendo expresar con ello que el erario real había de percibir sus rentas, aunque las autoridades locales primero y después ya el Ayuntamiento constituido atendieran a su arriendo.

La ciudad empezó a cambiar su trazado urbano al adaptarse las nuevas construcciones al gusto de los reconquistadores. Se abre un eje longitudinal al que se añade otro transversal, en sentido noroeste-suroeste, cruzándose ambos en la "plaza de las cuatro calles", la Plaza Mayor (hoy en día, Plaza de la Constitución), y se empezó la construcción de la Catedral de Málaga sobre los cimientos de la mezquita mayor.

Las iglesias y conventos construidos fuera del recinto amurallado que empezaron a aglutinar a la población dan lugar a la formación de los barrios de extramuros, como La Trinidad o el Perchel. En esta época tiene lugar la construcción del puerto y su posterior ampliación. El artesanado malagueño se divide en siete grandes bloques: textil, cuero, barro, metal, madera, construcción y alimentación.

El puerto malagueño sigue siendo un punto importante para la exportación e importación de mercaderías, tras la crisis que sufrió en el periodo de guerra de la conquista, tras la desaparición de la frontera cristiano-musulmana, el puerto volvió a florecer en su actividad con el retorno de los genoveses.

En esta época la industria principal es la construcción, debido a que en este periodo postconquista se derribaron la mayor parte de las humildes casas mudejares para construir lo palacios y casas de los nuevos conquistadores.

La actividad agraria se reorganiza pasándola a gestionar los nuevos repobladores cristianos trabajadas por exclavos, cuyo tráfico en esta época aumenta.

miércoles, 23 de marzo de 2011

LA INDUSTRIA MALACITANA EN LA EPOCA MUSULMANA


En el año 711 un ejército dirigido por Tariq ibn Ziyad derrota al rey Rodrigo y consigue suplantar al Estado visigodo. Con ello se inicia una nueva etapa, de ocho siglos de duración, en la cual las tierras de Málaga van a formar parte del mundo islámico. Esto va a suponer la interrupción del proceso de feudalización que había comenzado en época visigoda. Este fenomeno se observa en la provincia de Málaga en el asentamiento de nuevos pobladores, árabes y beréberes, y también con la huida a los montes de buena parte de la población indígena.

Con la sumisión de Bobastro ante Abd-al-Rahman III se impone totalmente el sistema islámico en la tierra de Málaga lo que se traduce en una etapa de paz y un nuevo esquema de población, basado en el desarrollo de las ciudades y la proliferación de alquerías en el mundo rural, con el florecimiento del artesanado y el comercio, así como de una agricultura intensiva con base en el regadío, en contraste con el feudalismo que sufría el resto de Europa.

Se convirtió en ciudad floreciente, rodeada por un recinto amurallado provisto de cinco grandes puertas y con gran cantidad de de arrabales y barrios asimismo amurallados, dentro de los que evolucionaban los adarves, salpicados de huertas a orillas del Guadalmedina, y cruzada de este a oeste por una vía que comunicaba al puerto y la fortaleza con el interior del recinto amurallado; junto al recinto, se asentaban los barrios de comerciantes genoveses y las juderías, de forma independiente del resto de la ciudad.
Sin duda, la Málaga musulmana tiene el sello propio de una urbe de Al- Andalus o de cualquier territorio islámico. Componentes característicos como la Medina bien protegida por murallas y torres, callejuelas recorriendo la urbe en si, las mezquitas, la Madraza, la fortaleza vigilante, o el puerto lleno de vida.

Málaga cumplía su función de ciudad portuaria, a la que llegaban comerciantes, sobre todo italianos. Esta ciudad tiene su centro fundamental en la medina amurallada, donde vive la población principal; una fortaleza también amurallada auxilio de las gentes y vigilante de las costas; y unos arrabales como núcleos de población resultante del incremento demográfico en la medina y que se adosan a los alrededores del núcleo principal.

La línea costera, desde el s. VIII, se situaría, desde su formación en la escollera del puerto romano, sobre lo que hoy es la Plaza de la Marina. En esta zona se situarían unos almacenes portuarios, sirviendo también como necrópolis emiral. Se continuaría la línea siguiendo lo que actualmente es la Alameda. Es de destacar como detalle curioso aportado por Guillén Robles, que existiría una isla llamada Arriarán sobre la Puerta del Mar, que mantiene todavía su nombre.

Málaga, junto a al puerto de Almuñecar, serían de los puertos más importantes del litoral andalusí. Fueron zonas cobraron gran auge con la llegada de tribus del norte de África en época de los Banu Zirí. Incluso el puerto de la ciudad tenía competencia con el de Bezmiliana, localidad cercana, quizás para ayudar al flujo comercial, puesto que aquella zona, llamada Axarquía, era muy importante para el comercio, aportando seda muy apreciada en época nazarí, entre otras cosas.

Fueron los Hammudíes los que sobre en el s. IX fortificaron el fondeadero para rechazar posibles ataques normandos, al igual que en este tiempo se construye la alcazaba, como vigía de excepción del puerto. Hay que recordar que el fondeadero era la playa misma, donde se llevaban a cabo las cargas y las descargas.

También desde el fondeadero se podía llegar al Arenal, zona de playa situada en la parte oeste del río junto al arrabal de los mercaderes de paja. Recordemos que ese Arenal era conocido hasta el s. XVIII como la rambla.

Para los genoveses en virtud del pacto nazarita-genovés a partir de la segunda mitad del s. XIIIes de especial importancia, la capital, Granada, y Málaga siendo para ellos focos de gran interés. Productos para ellos de interés eran el azúcar, la seda, cereales, los higos de gran fama en aquellos tiempos, pasas, salazones malagueños o almendras. También mostrarán gran interés por la loza dorada, al igual que lo hizo la flota nazarita.

Los genoveses contaban con un baluarte adosado al muro, pero fuera de la propia medina, algo que no se ve en muchas ciudades musulmanas, haciendo las veces de fortificación y alhóndiga. Sería utilizado como almacén y base para importantes genoveses como los Spínola o los Grimaldi.

Las actividades económicas principales  serán la artesanía y el comercio con lo que hay un desarrollo de la ciudad y la proliferación de alquerías en el mundo rural, con el florecimiento de una agricultura intensiva con base en el regadío. 

martes, 1 de junio de 2010

LA INDUSTRIA MALACITANA EN LA EPOCA VISIGODA

En el año 476 el Imperio Romano ha caido. Suevos, Vándalos y Alanos invaden la Peninsula Iberica.

Estos pueblos barbaros y de sociedad guerrera, rural y nómada tan solo se dedicarón a destruir lo que había a su paso durante la conquista.

Tan solo los Visigodos, el pueblo más romanizado de ellos pudieron parar la barbarie, aunque limitandose tan solo a hacer uso del patrimonio romano que sobrevivió durante su dominio sin aportar nada nuevo.

Su comercio estaba basado en el trueque, no acuñaban moneda, luego no se recaudaban impuestos regularmente y de forma eficiente para poder acometer obras públicas.
Por lo que poco contribuyeron estos pueblos al desarrollo de la ingenieria fabril en el municipio, aún siendo durante un tiempo Malaca, capital del imperio bizantino en Spania.

jueves, 27 de mayo de 2010

LA INDUSTRIA MALACITANA EN LA EPOCA ROMANA

Sobre el año 218 a.c tras las guerras púnicas, Roma vence a Cartago, pasando a dominar esta todos su territorios, así Malaka pasá a formar parte de la Hispania Ulterior, pasando a denominarse Municipium Malacitanum, siendo punto de tránsito de la Vía Hercúlea, comunicandose a través de ella con la Hispania Interior y demás puertos del Mediterraneo.

Malaca durante esta época era municipio confederado que se regía por un código especial, la Lex Flavia malacitana, alcanzando un notable desarrollo.

La economía y su industría principal seguia siendo la agricultura en el interior y la pesca en las zonas costeras, sobresaliendo la elaboración del garum, muy valorado en Roma.

El puerto de Malaca, implantado por los fenicios para su comercio de salazones, durante esta época Romana el movimiento del puerto se incrementó, motivado por los productos que salían de estas costas hacía Roma, como eran minerales, almendras, cerámica, vino, aceite y el producto estrella, la salsa garum, como hemos dicho anteriormente.

Fruto de esta actividad comercial de exportación, es de suponer que alrededor de dichos productos se incrementarían igualmente la industria naval, cerámica y maderera, que producirían las vasijas cerámicas, ánforas y toneles de madera para transportar los vinos, aceites y el garum, se construirian barcas , barcos para la pesca y el transporte de mercancias, se realizaría el mantenimiento de los barcos cada vez que arribaban a puerto, en aquella época todos los montes que rodeaban la ciudad erán grandes bosques, por lo que la materia prima  necesaria era abundante.

De esta manera Málaca prospero economicamente, creció demográficamente, construyendose incluso un teatro para el entretenimiento de sus ciudanos.


Igualmente la ingeniería y obras civiles e hidraúlicas cobraron importancia con la dominación romana en el municipio y provincia, construyendose acueductos para el transporte de agua hacía las poblaciones e industrías, calzadas, puentes , ampliaciones del puerto para absorver el floreciente comercio del mediterraneo, se construyeron templos, villas, termas, mercados, foros y demás edficios públicos de la administración y vida civil romana, no olvidemos que Malaca en su condición era ciudad romana por derecho.


En las zonas interiores de la provincia y municipio la actividad principal sigue siendo la agricultura, la ganadería(ovino y caprino), sin olvidarnos de la mineria y la actividad de las canteras de sus montes,  donde se obtenian piedras y mármoles, matería prima para las edificaciones romanas.
Importancia tambien tomo la alfarería(tejas, ládrillos,  anforas, vasijas, elementos decorativos) y la cerámica (azulejos) para la decoración de las villas romanas, materia prima la obtendrían de los barros de las zonas humedas de los rios de la zona, como el guadalmedina y gualdalhorce.


Podemos resumir que desde la época Turdetana la actividad industrial y ecónomica del municipio ha estado siempre vinculada principalmente a la pesca y sus derivados en la zona costera y a la agricultura en la zona interior.

martes, 11 de mayo de 2010

LA INDUSTRIA MALACITANA DURANTE LA DOMINACION CARTAGINESA

En el año 573 a.c la capital fenicia de Tiro cayó en el poder de Nabucodonosor II, con este hecho la hegemonía fenicia en el mediterraneo terminaba, y todas sus colonias y factorías a lo largo y ancho del Mediterraneo pasaron a manos de los Cartagineses, entre ellas Malaka.

Hasta ese momento la ciudad de Malaka había prosperado bajo la tutela fenicia, los cuales se llegaron a mezclar con los indígenas íberos Turdetanos y Bastetanos. Con ellos los procesos productivos mejoraron, se acuño moneda y el comercio floreció.

Las principales industrias malacitanas en aquella época eran:
  • La Industria Conservera y de Salazones de Pescado(Garum principal producto elaborado).
  • La Industria Pesquera.
  • La Industria Naviera.
  • La Industria Metalúrgica y Minera.
  • La Industria Agrícola( Olivo, vid y sus derivados, aceites y vinos).
  • La Industria Ganadera.
Fruto de esa producción, los fenicios exportaban dichos productos por toda la rivera del Mediterraneo, importando e introduciendo en Malaka otros productos elaborados en otros sitios.

Fue la hegemonía en el comercio del Mediterraneo lo que lanzó a los Cartagineses contra ellos para controlarlo.

Dado que los Cartagineses eran descendientes de los Fenicios, algunos de los restos hallados en la provincia bien puede ser de unos o de otros, por lo que en el periodo Cartagines, la economía, industria y comercio siguieron los patrones fenicios.

domingo, 9 de mayo de 2010

LA INDUSTRIA FENICIA Y GRIEGA

Durante los s.VIII al III a.c se van estableciendo numerosos enclaves fenicios en la costa malagueña, probablemente fruto del comercio con los Turdetanos y demás pueblos íberos del sur de la península ibérica.

Al mismo tiempo también llegan los griegos, llegando a establecer un asentamiento importante sobre el s.VI a.c cerca del río veléz (Mainake).

Sin embargo fue el  pueblo fenicio quien mayor presencia mantuvo en la zona desde que se establecieron en el s.VIII a.c en Cerro Villar, en la desembocadura del actual río Guadalhorce, llegando estos a fundar la ciudad de Malaka, donde actualmente está se sitúa Málaga Capital.


Fruto de la llegada a la zona de estos pueblos y su contacto con los Turdetanos, la actividad comercial aumento considerablemente, la costa malagueña se convirtió en un gran exportador de los productos de la zona como la salsa garum, aceite, vino, salazones, conservas, púrpura, plata y cobre, llegándose a acuñar moneda.

El pueblo fenicio introdujo innovaciones y avances en la agricultura, cerámica, metalúrgica, industria naval por lo que podemos pensar que fue a partir de este momento donde la industria malagueña y su comercio empezó a tener un nombre importante allende de los mares, fruto del comercio a lo largo del mediterraneo de fenicios y griegos, Malaka se habría al mundo conocido, entrando en contacto con otros pueblos que traían nuevos sistemas de producción y nuevos productos.

Por lo que podemos resumir que en esta etapa en aquella época en nuestra actual Málaga se establece el comienzo de una verdadera ciudad, se produce una primera revolución industrial, social y económica fruto del contacto de fenicios y griegos con los poblados turdetanos. Mejorando de esta manera la industria ya existente e introduciendo nuevos productos y métodos de producción.

Fuentes:

sábado, 1 de mayo de 2010

LA INDUSTRIA TURDETANA

Los Turdetanos fueron un pueblo prerromano asentado entre el Algarve en Portugal y Sierra Morena, coincidiendo con el territorio de la antigua civilización de Tartessos, siendo por tanto estos descendientes de los mismos. Limitaban al norte con los Túrdulos, al oeste con los Conios y al este con los Bastetanos.

Concretamente la actual Málaga se encontraba en la zona limítrofe entre Turdetanos y Bastetanos.


Una de sus principales ciudades era Acinipo en la Serranía de Ronda.

Durante el período Íbero, los poblamientos tendieron, con algunas excepciones, a concentrarse en cerros y colinas de cota media (unos 600 metros sobre el nivel del mar) o a nivel del mismo.

Por ello han aparecido restos de está época en Campillos, Cañete la Real, Valle de Abdalajis, Álora, Antequera, Colmenar, Periana y Archidona.



Era el pueblo más civilizado de la península ibérica a la llegada de los romanos. Su próspera economía es alabada por Estrabón quien afirma que los Turdetanos son los más cultos de los íberos.

La minería sería uno de sus recursos más importantes. Había toda una industria asociada a las minas, situadas donde anteriormente se encontraban las factorías tartésicas. Estas factorías se encontraban principalmente en un triángulo formado por las actuales Huelva, Cádiz y Sevilla. Estas minas han sido bien estudiadas por algunos historiadores, como Antonio Blanco Freijeiro o Rothenberg. Los minerales extraídos son plata y cobre, convirtiéndose sobre todo la plata en el principal material explotado.

Según Estrabón, la agricultura fue muy importante y muy variada. Según Varrón, éstos ya conocían el arado y el trillo antes de la llegada de Roma, por influencia de Cartago. Cultivaban cereales, olivo y vid.

Sobre ganadería, se sabe que criaban bueyes, ovejas, y caballos. Se conoce la cría de ovejas por la industria textil asociada, como muestra la gran cantidad de fusayolas y pesas de telar encontradas en algunas tumbas.
En toda la costa mediterránea se fabricaba lo que los romanos llamaban garum, una salsa con tripas de pescados en salmuera, que posteriormente se comercializaría por todo el imperio a muy alto precio. También hubo otro tipo de industrias relacionadas con la pesca, conserveras y salazones sobre todo, siendo muy importantes en la zona del Estrecho.
El comercio interior, el comercio interregional y el comercio exterior fue muy importante para su economía. Hay muy pocos datos de los dos primeros, ya que es posible que fueran productos naturales perecederos o manufacturados similares al del resto de pueblos.
Podemos resumir que hasta la llegada de Fenicios y Griegos a la zona de la provincia de Málaga existían poblados y la industria que se mantenía era practicamente la misma que en el Neolítico (Agricultura, Ganadería y Cerámica), aunque habiendo introducido nuevos cultivos y crías de ganado.
Más importante es el avance en la Metalurgia, al trabajarse ya de mejor manera el hierro, el cobre, el bronce, la plata, apareciendo la industria orfebre y sobre todo la actividad Minera.
En cuanto a la pesca, la actividad más fuerte en la zona de Málaga, surgió una actividad industrial auxiliar, que fue la naval y la de salazones y conservera, famoso en Roma era el garum, que ya se elaboraban en la zona antes de la llegada de los Fenicios.
En esta época también cobra importancia el Urbanismo y las Edificaciones de piedra, barro y cañas.
Aparece una industria auxiliar de la ganadera como es la Textil y de la Agricultura fruto del olivo, la aceitera.

El comercio se reducía al interno, entre poblados y ciudades.

Fuentes:
http://es.wikipedia.org/wiki/Turdetanos

http://www.ffil.uam.es/reib3/diego_8.htm 
http://cacela-hispania.blogspot.com/2009/11/los-turdetanos-herederos-de-tartesos-y.html